Análisis de programa regional para el Corredor Biológico Mesoamericano
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Código de material
85
Acceso
Abierto
Contribuido por
Itzel Araúz
Palabras clave
Conservación, conectividad ecológica, Desarrollo sostenible, Naciones Unidas, ONU, Corredor Biológico Mesoamericano, Banco Mundial, Mesoamérica, corredores biológicos, ANAM, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Biodiversidad, Cooperación regional, sistema de ordenamiento territorial, Sistema Centroamericano de Áreas Protegidas, corredores naturales, zonas de amortiguamiento y uso múltiple, Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), CBM
País
Panamá
Fecha
11
Nombre de archivo original
Análisis de programa regional El Corredor Biológico Mesoamericano - 2011 - Banco Mundial.pdf
Crédito
Grupo de Evaluación Independiente del Grupo del Banco Mundial
Document extract
El contenido de biodiversidad del sistema del CBM sigue bajo fuerte amenaza pese a los importantes logros institucionales. El fortalecimiento de la capacidad de los ministerios de Medio Ambiente y de los departamentos que se ocupan de las áreas protegidas del CBM ha mejorado la confección de mapas y modelos relativos a ecosistemas, incendios y riesgo de desastres. Las instituciones regionales respaldadas por el Banco y otros donantes, como el Centro del Agua del Trópico Húmedo para América Latina y el Caribe (CATHALAC) y el Sistema Regional de Visualización y Monitoreo (SERVIR), ofrece importantes servicios de intercambio de datos que encierran gran potencial para la futura integración del cambio climático y los servicios de gestión de riesgos de desastres. Pero estos avances se ven empañados por la escasa cooperación intersectorial, la falta de una fuerte influencia de la CCAD que permita integrar mejor la diversidad biológica en los convenios regionales y la ausencia de un modelo de financiamiento para el CBM que abarque toda la región. El financiamiento sostenible del CBM fue y sigue siendo todo un desafío para la conservación del sistema de corredores.
El nivel de compromiso de los países integrantes con el CBM varía. México y Costa Rica son los más avanzados en este sentido y han formulado firmes compromisos para respaldar y ampliar sus sistemas de corredores. Desde 2008, el gobierno de México ha financiado personal específico dedicado a los proyectos del CBM en México, mientras que el de Costa Rica ha establecido el Programa Nacional de Corredores Biológicos, cuya función es actuar como punto de contacto para la coordinación regional (subnacional), desarrollar redes de corredores locales y movilizar financiamiento. Costa Rica también ha puesto en práctica en forma experimental mecanismos de pagos por servicios ambientales que están contribuyendo a cambiar las actitudes respecto de la valoración de los servicios de los ecosistemas. Pero los incentivos actuales para la conservación no llegan a compensar el aumento en el valor de la tierra en Costa Rica, Panamá y otras áreas costeras atractivas del CBM. Las innovaciones que se han intentado y han sido probadas en Costa Rica y México — en forma de esquemas de pagos por servicios ambientales, pagos por el carbono, y comercialización y promoción de bienes naturales sostenibles — requerirán intervenciones creativas y capaces de adaptarse a los diferentes contextos locales y de cada país entro del sistema del corredor como un todo.
El Banco Mundial ha desempeñado múltiples funciones en su apoyo a la consolidación del CBM. Ha respaldado directamente dicho corredor mediante la ejecución de una serie de proyectos financiados por el FMAM y ha utilizado otros fondos fiduciarios para apoyar en forma directa las prioridades del CBM. El Banco ha actuado como factor convocante en respaldo a este corredor facilitando reuniones clave de donantes internacionales y talleres regionales y propiciando la formación de vínculos, por ejemplo, entre la NASA y los funcionarios de los países. También ha promovido un diálogo fluido sobre políticas entre sectores clave de los países comprendidos en el CBM incorporando las cuestiones relativas al corredor en otros elementos de la cartera de financiamiento del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) y la Asociación Internacional de Fomento (AIF) en esferas tales como el desarrollo rural y la administración de tierras.
La conexión del corredor se trazó a través de una ruta que transcurre principalmente a lo largo de la costa del Atlántico. Los científicos denominaron la ruta original ―Paseo Pantera‖ (gráfico 1), por el animal leonado que habita desde Canadá hasta Argentina (Science, 2001). El mapa conceptual original del Paseo Pantera, desarrollado por la Universidad de Florida y la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD) a principios de la década de 1990, ilustra el concepto original de la creación de corredores sin interrupciones para promover la conectividad biológica entre los principales parques y reservas de toda la región. Con la mejora de la tecnología de los sistemas de información geográfica (SIG) y de las series de datos resultantes, se desarrolló un segundo mapa para el Programa Ambiental Regional de Centroamérica (PROARCA), financiado por la USAID (Agencia de Desarrollo Internacional de Estados Unidos) en colaboración con la CCAD, el PNUD y el FMAM. Mientras que el mapa conceptual contenía indicaciones generales de las conexiones conceptuales, el mapa del proyecto refleja con más detalle la realidad política de la planificación de la conservación. Un estudio realizado en 2004 por la Real Academia de las Ciencias de Suecia para estudiar los patrones aéreos y las dinámicas espaciales del CBM concluyó que este cambio se debía, en parte, al papel predominante que desempeñan los Gobiernos y los programas encontrados de los diversos grupos de usuarios de la tierra dentro de las áreas examinadas y en sus alrededores (Zimmerer y otros, 2004). Sin embargo, este último mapa carecía de precisión (daba el mismo color a todas las áreas protegidas) y desdibujaba la importante distinción entre las áreas principales de conservación dentro de las categorías I a III de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y las áreas de uso múltiple dentro de las categorías IV a VI, que en el caso de América Central suelen estar plenamente habitadas y presentar numerosas cuestiones relacionadas con los derechos a la tenencia y los recursos.
Pie de foto
Este documento es un análisis de programa regional en el que se analiza el respaldo otorgado por el Banco al CBM. Este análisis se estructura en torno a la evaluación de cinco proyectos financiados por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM) y ejecutados por el Banco Mundial en Costa Rica, Honduras, México, Nicaragua y Panamá, que tuvieron como objetivo común consolidar el CBM. En este trabajo también se exponen los logros de las actividades de los fondos fiduciarios, financiadas por el Programa de Colaboración entre el Banco y los Países Bajos (BNPP) y puestas en marcha en forma paralela a los proyectos del FMAM y el Banco Mundial. El presente estudio difiere de otros análisis de programas regionales o de alcance mundial realizados por el Grupo de evaluación Independiente IEG pues aquí se evalúa la contribución de una serie de proyectos del Banco Mundial al logro de un objetivo de orden superior, a saber:
―[Establecer] un sistema de ordenamiento territorial, compuesto por la interconexión del Sistema Centroamericano de Áreas Protegidas, con zonas aledañas de amortiguamiento y uso múltiple, que brinda un conjunto de bienes y servicios ambientales a la sociedad centroamericana y mundial, y promueve la inversión en la conservación y el uso sostenible de los recursos naturales; todo a través de una amplia concertación social, con el fin de contribuir a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la región"―. Declaración conjunta emitida durante la XIX Cumbre de los Presidentes Centroamericanos, Panamá, 1997.
El presente análisis se organiza en torno al marco evaluativo que aplica actualmente el IEG para los análisis de programas regionales y de alcance mundial.
Se detallan la historia del corredor y las medidas adoptadas por los Gobiernos y los donantes para ponerlo en marcha. También se resumen las conclusiones de las evaluaciones externas de dos programas regionales (de la Agencia de Desarrollo Internacional de Estados Unidos [USAID] y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo [PNUD]), que sentaron las bases para los proyectos del Banco relativos al CBM.
Notas
La conservación o la planificación del corredor requiere cooperación intersectorial. El Banco Mundial promovió un diálogo fluido sobre políticas entre sectores clave de los países comprendidos en el CBM incorporando los asuntos relacionados con el corredor en otros elementos de su cartera de préstamos. Esto abrió un espacio para el diálogo sobre las principales amenazas al sostenimiento del sistema del corredor y la necesidad de integrar las políticas de los sectores rural y ambiental para lograr resultados.